La estrella está aquí
En la tierra, por uno de esos hechos que casi nadie logra explicar, cada año sigue una estrella indicando dónde nacerá el Niño Jesús. El año pasado la estrella guió a los Reyes de Oriente hasta la cercanía de una gran ciudad: “Irá a pararse sobre la catedral”, pensaron los Reyes.
La estrella, sin embargo, se detuvo en un barrio popular, como otros muchos, con balcones en línea y viejas antenas de televisión. “La Navidad está aquí -se dijeron los tres- en el fondo tampoco la primera vez tuvo lugar en un palacio”. Cogió cada uno el regalo que le traía al Niño Dios y entraron en el portal sobre el cual se había posado la estrella. ¿Y qué vieron?: a una mujer que cerraba de golpe la puerta del primer piso y se acurrucó en el rellano de la escalera. Tenía un enfado tremendo y muchas ganas de llorar. Poco después se abrió la puerta. Salió un hombre y, tras unos segundos de incertidumbre, se sentó al lado de la mujer. Pasó un minuto. El silencio era profundo A distancia los tres Reyes contenían la respiración.
-Elena, dijo el hombre, debes perdonarme
-No, no puedo, respondió ella, sacudiendo la cabeza
Tras varios minutos de angustioso silencio la mujer susurró: “te perdono otra vez”.
Los Reyes respiraron aliviados y a coro dijeron: “Gracias a vosotros, este año también hay Navidad”. (Relatos y Narraciones-2, p. 77)
REFLEXIÓN: ¿Sueles perdonar “otra vez” o sólo das una oportunidad? ¿Cuántas veces te han perdonado a ti? ¿Todavía guardas rencor por alguna persona y sabes por qué? ¿Vale la pena seguir manteniendo ese sentimiento?
Jesús, la lección de hoy es fácil de entender: la bondad hace posible que tú sigas naciendo en esta tierra nuestra. Y entre los actos buenos que podemos realizar está en primerísimo lugar el perdonar. Ayúdanos a no ser rencorosos y sí ser capaces de perdonar siempre, como nos gusta ser perdonados. Te rezamos el Gure Aita, fijándonos especialmente en esas palabras que tú nos enseñaste: “perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofendieron”; y pidiéndote que los Derechos Humanos sean respetados en todos los países del mundo.
