Un anciano daba este sabio consejo a los _.jóvenes de su tribu:

«Cuando estés seriamente enfadado con alguien que te ha ofendido mortalmente y decidas matarlo para salvar la honra. siéntate antes de salir. Cierra los ojos y escucha los sonidos de la selva. Escucha el viento entre las hojas y las bandadas de pájaros que habitan en lo alto de los árboles. Una vez que acalles tu mente, notarás que la muerte, a fin de cuentas, es un castigo demasiado serio. Te darán ganas entonces de ir a darle una paliza.

Antes de ir a buscar un grueso bastón, siéntate, respira hondo y escucha el agua. Como fluye ligera por la tierra. Te tranquilizará. Entonces pensarás que unos cuantos insultos fuertes y sonoros podrían suplir muy bien a la paliza…

Por fin, cuando te dispongas a salir para ir a insultar a quien te ha ofendido, siéntate de nuevo, y respira profundo. Cuando acabes, quizás sólo desees hacer las paces con quien te había ofendido y causado mal.»

 

Recordar los últimos enfados serios que habéis tenido… O los enfados tenidos durante la última semana.

¿Cómo habéis actuado? ¿Cómo os gustaría haber actuado​